Tu destino es el destino de tus hijos

Diariamente los adultos nos damos cuenta, en pequeños detalles de la vida cotidiana, que es nuestro inconsciente el que rige nuestras vidas y no nuestra voluntad. Recuerden la vez que quisieron empezar una dieta y "algo más allá de ustedes" se los impidió o aquella vez que reaccionaron de una forma exagerada, fuera muy agresiva o muy sumisa, ante un comentario sin importancia de un conocido. A muchos les inquietan estas situaciones, otros ni se percatan de ellas; algunos quieren retomar el control y hacen algo al respecto, otros lo dejan pasar. Empero, todos los que ya somos padres deberíamos tomar cartas en el asunto. Este inconsciente que a veces nos pone timos en nuestra vida de adultos, es el mismo con el que nos relacionamos con nuestros hijos. Es él el que determina nuestras preferencias, juicios y exigencias hacia ellos. Es él el que nos hace consentir de más a un hijo y exigir madurez a otro; el que nos hace querer pasar tiempo de calidad con nuestros hijos pero que no sabe cómo y por lo tanto lo evita. Él es el que dirige nuestros pensamientos, nuestras conductas y por lo tanto nuestro destino. Y ahora que somos padres, el destino de nuestros hijos también. Trabaja en ti y estarás trabajando en tus hijos. Llega al fondo, conoce tus motivaciones, tus miedos. Sólo así podrás ser un arquitecto activo y consciente de tu destino y de los cimientos que legues a tus hijos. #padresestrella #padresconscientes